viernes, 29 de febrero de 2008

Proyecto 2008

Ya dominado el arte de la sopa maruchan, he decidido conquistar la cocina.
No tengo idea de cómo se prepara… un pavo por ejemplo. Y ya nadie se ríe cuando digo que no sé cocinar. Me ven raro. Abren mi refrigerador y ven botellas de agua (que nunca tomo), diet coke (lo único que tomo) y una caja de cerveza que esta ahí desde navidad. Había lechuga, pero después de una ensalada la deje en su bolsa y eventualmente se echó a perder. La leche igual. Tengo queso, un frasco de maraschino cherries y un jugo de guayaba que nunca compre y nunca tomaré pero ahí esta, al fondo en una esquina.

Así que en el 2008 mi proyecto es aprender a cocinar. Tengo poca ambición, no me quiero aventar una receta como “Duck a l'Orange”, para eso hay gente especializada que estudia en Paris. Pero ya llegue a una edad en donde no tener una pista de cómo preparar una sopa de fideo da vergüenza.

Y me gusta cocinar, bueno, si Ok, nunca lo he hecho pero compro las revistas y los programas de cocina siempre me los aviento. Martha Stewart, Jamie Oliver, Nigella Lawson son dioses para mi. De hecho tengo colección de recetas, esperando a que me anime a prepararlas.

Debo abrir un paréntesis aquí para confesar que no tengo estufa. Ese puede ser un problema para llegar a mi meta. Pero, si mi mala ortografía no me impide escribir un blog, la falta de una estufa no debe ser un obstáculo. Tengo un microondas, es casi lo mismo ¿no?

Mientras tanto, voy a empezar con una receta sencillita: ¡Jello!